¿Podemos distinguir entre una crisis espiritual y un bombardeo de problemas externos?
En la mayoría de los casos no. Los problemas tienen distintos orígenes, algunos de personalidad, otros que necesitan de terceros, otros institucionales etc.etc.etc.
La problemática actual hace que lentamente los seres humanos nos alejamos de nosotros mismos hasta el punto del desequilibrio, la perdida de confianza, la inseguridad, llegando en algunos casos a la depresión, esto implica una pérdida de fuerza vital que además conlleva a enfermedades que en algunos casos se hacen crónicas y en otros incurables.
¿Espíritu débil por falta de valores y sentimientos? o ¿acoso de problemas que nos alejan de uno mismo?
(problemas que van minando nuestra mente, culpando a otros o a uno mismo).
Puede ser ambas cosas a la vez, van tomadas de la mano, la una se debilita, mientras la otra se fortalece.
El verdadero motor de nuestras acciones, es nuestro espíritu, éste gobierna el cerebro, pero nace en el centro del corazón, es el impulsor de todo lo que hacemos. Si está lleno de vida hará maravillas, sobrevivirá ante la tempestad, renacerá las crisis y protegerá a otros espíritus más débiles ayudándoles.
Si el espíritu se llena de odio, codicia, etc,será una fuerza destructiva que al final terminará con si mismo. Por otro lado los espíritus débiles son manipulados y llevados como corderos, haciendo la voluntad de aquellos que se aprovechan, sacando partido en su propio beneficio.
Está en cada uno abrir los ojos y hacer fuerte nuestro espíritu, contamos con muchas herramientas para lograrlo, la primera la voluntad, (que es la fuerza que mueve el mundo), la segunda, que no estamos solos, siempre hay espíritus dispuestos a ayudar, solo hay que pedirlo, la tercera que no hay culpa ni culpables, solo experiencia, los errores nos llevan a aprender, y los aciertos a crecer, el reconocer nuestra imperfección, nos ayudará a comprender que el que nos hace daño es igual de imperfecto que uno, nos lleva al perdón y al ser perdonados, elevando nuestro espíritu a la divinidad, fortaleciéndolo, desarrollando nuestra existencia mucho mejor.
Todos los problemas se pueden clasificar por ejemplo: los de índole económica con dinero, los de salud a través de la medicina y sus instituciones o medicamentos. Los sentimentales por medio del diálogo, los de gobierno a través de los gobernantes, los laborales en los comité de empresa o los organismos sindicales para que presiones al estado a mejor las leyes laborales y castigar a los empresarios abusivos, los pobres que cada país de la solución con su gente para resolverlo o a través de la ONU etc.etc.etc. Debemos diferenciar cada problema en su justo lugar, y por más pequeño que sea todos son importantes incluso inchar la rueda de la bicicleta de nuestro hijo/a.
Debemos aceptar que tenemos limitaciones de todo tipo; corporales, visuales, de coordinación, de interpretación, económicas, sociales, políticas, legales, etc,etc,etc.
El primer paso, y el más importante, es parar toda actividad por un instante, para pensar en uno mismo, dónde estoy?, como es mi vida actual, (no la pasada), pensar cada problema por separado y que posible o posibles soluciones tiene, sino están a nuestro alcance, ver quien puede ayudarnos a resolverlo. No tener prisa, serenarse que todo tiene solución, pedir ayuda a seres de espíritus fuertes que seguramente encontraran el camino más rápido para su solución.
(continurá)
ZER
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